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Durante dos mil años, la hoz se utiliza en Inglaterra, Francia y en la mayoría de países europeos. Algunas herramientas que datan de la ocupación romana fueron encontrados en sitios arqueológicos en Inglaterra (en partes de Wiltshire y Somerset, al suroeste y al este de Essex), pero también en Francia y Suiza . Sus formas son muy similares a los que todavía se utiliza hoy en día, y se cree que fueron empleados por el mismo trabajo.

 

En Inglaterra, la hoz se utiliza principalmente para cortar y dividir la madera verde, la madera de los árboles jóvenes de menos de diez años, por lo general crece en monte bajo. Un monte bajo es un monte bajo
se compone de árboles que se cortan a ras de tierra después de diez años de crecimiento. Uno puede encontrar monte bajo viejos en Inglaterra edad doscientos o trescientos años. Las maderas más utilizadas son avellanos, sauces, fresnos y castaños. Uno puede fácilmente dividir todos estos bosques cuando están verdes y se doblan fácilmente con la mano para darles la forma deseada. A medida que estos bosques se trabajaron antes de secarse, formarán el sujeto tiene una esperanza de vida superior a 10 años.

 

Artesanías de madera típicos que utilizan la hoz para recoger, cortar a la misma longitud, cortando listones, o podar árboles jóvenes incluyen la fabricación de pantallas, mástiles o pernos (grapas que fijan techos paja), las escobas y cestos o artesanía de cestería. Esta herramienta también se utiliza ampliamente para cortar la leña que ardía en los hornos y el colocación de coberturas (?)* setos. Para ello, la madera viva fue cortada, parcialmente cortada y doblada, y se coloca en paralelo o ligeramente inclinada hacia el suelo, donde tuvo que empujar, a fin de formar una barrera que se recuperará de forma natural y evitar que el ganado pase. Estos obstáculos infranqueables pueden durar 15-20 años y sólo requieren un tamaño pequeño cada dos años. Esta técnica sigue siendo ampliamente utilizado en el centro de Inglaterra, y también en algunas partes de Gales. Dijo que también se practicó en Francia, sobre todo en Correze. A menudo, la hoz se utiliza para podar los árboles, y en Francia, antes de la aparición de tijeras de podar, que se utilizaron para podar las vides.

 

Se cree que la gran variedad de formas y tipos de hoces encajar las diferentes necesidades de los habitantes de cada pueblo en Inglaterra, Francia y otros países europeos antes de la Revolución Industrial. Originalmente, estas herramientas fueron hechas por el herrero del pueblo para el empleo en el campo. Más tarde, los pequeños taillanderies han creado, por ejemplo, en el borde de Dartmoor y las Mendips en Inglaterra, o en las Doubs Francia y las fraguas, que utilizan la energía de los molinos de agua, las herramientas que se vendieron en un área más grande producen. Después de 1800, las industrias más grandes comenzaron a competir con los fabricantes más pequeños. Con el fin de atraer a más clientes, tenían que producir una gama más amplia de hoces con formas regionales. La mayoría de los catálogos taillanderies Sheffield, el centro de Inglés de la fabricación de herramientas con filo, y también fábricas francesas del siglo XIX fueron documentando más de 120 modelos diferentes por región, a menudo disponibles en una gama de tamaños de 6 pulgada a 12 pulgada (15 cm a 30 cm).

 

Antiguamente, en las zonas rurales de Inglaterra y Francia, cada uno poseía al menos uno y muchos estaban empleados en las principales ciudades de leña división. Varios millones de hoces fueron fabricados, y hasta hace poco, en la década de 1960, los fabricantes británicos y franceses ofrecen un rango de 20 a 50 formas diferentes. Hoy en día sólo hay unos pocos fabricantes, y la elección es más limitada. Sin embargo, con el creciente interés para la artesanía ya través de la restauración de antigüedades, la hoz se convierte en popular. Todavía es fácil de conseguir y son ampliamente utilizados en las zonas rurales de Europa. La colección privada, una carga de viejos vencejos, iniciada a principios de 1980 tiene como objetivo preservar una parte de nuestro patrimonio industrial y rural que de lo contrario desaparecerá rápidamente.

 

Hasta la fecha, esta colección se compone de miles de herramientas, más de dos mil seiscientos hoces británicos, y gracias a los amigos, a unos cientos de anzuelos factura francesa y otros países. Se representan copias de la mayoría de los diferentes estilos regionales y los diversos fabricantes ingleses. La mayoría de estas herramientas fueron originalmente en muy malas condiciones: oxidado, dañado, roto, sin mangas, etc. Para el coleccionista, es un placer para rehabilitarlos y descubrir de nuevo una digna herramienta fabricante de herramientas o herrero que lo creó. Sin embargo, aún falta mucha investigación por hacer - por suerte hemos hecho nuevos descubrimientos o hallazgos cada mes. Es con gratitud que nos reunimos nuevas piezas que serán cuidadosamente restaurada y preservada para el disfrute de las generaciones futuras.

 

* mirar: Hedge-laying

 

 

 

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